
Esta muestra colectiva reúne a más de setenta artistas de las Islas Baleares y de la Comunidad Valenciana que, desde perspectivas y técnicas diversas, han encontrado en el almendro en flor un motivo de inspiración.
El almendro es uno de los símbolos más emblemáticos de los territorios mediterráneos. Su flor, delicada y efímera, transforma los paisajes invernales de enero y febrero en un mar de blancos y rosas. Esta floración temprana, de una belleza conmovedora, ha inspirado a artistas y poetas de muchas generaciones, y forma parte de nuestro patrimonio natural y cultural.
Los almendros en flor despiertan una memoria colectiva que nos remite a las raíces y a la infancia: montañas abancaladas teñidas de blanco, aromas cautivadores y frutos sabrosos que nutren nuestra cocina.
La pluralidad de miradas, generaciones y trayectorias convierte la exposición en un proyecto abierto e inclusivo, que aspira a democratizar el arte y a hacerlo accesible a todos los públicos.
Cada obra refleja un paisaje interior o un recuerdo personal, pero al mismo tiempo forma parte de un conjunto pictórico donde las tonalidades se entrelazan para tejer un tapiz colectivo que florece en cada sala donde se expone.
Tras su presentación en la Ruta del Arte de Ibiza y su participación en Algaidart, en Mallorca, la exposición continúa su recorrido por las Llonges de la Cultura de la Fundación Baleària, llevando los colores y los aromas de los almendros en flor a la Casa de la Cultura de Pedreguer.











